António Bico, CEO Zurich Portugal: "Predecir el futuro es totalmente crítico para nuestro negocio"
António Bico es Director General de Zurich Portugal desde 2007. Con una larga carrera en Zurich, comenzó en el departamento de siniestros, pasando después a varios puestos de dirección. Con una amplia experiencia internacional dentro del Grupo Zurich, António tiene un Máster en Dirección y Negocios, un MBA en Dirección y Administración de Empresas y varias formaciones en alta dirección, liderazgo y coaching en Alemania, España, Francia y Suiza.
Con dominio del inglés, el francés y el español, António es presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Suiza en Portugal desde 2016. Gracias a su pasión por la música, el Director General de Zurich Portugal dedica parte de su tiempo libre a estudiar y practicar el piano y forma parte de la banda musical de Zurich, la ITA - Incapazes de Tocar Afinados. António también es voluntario de Mission Blue, el club de voluntarios de Zúrich.
¿Cuáles son los principales retos de sus responsabilidades actuales?
Hay un reto permanente que el momento presente. Y el reto es gestionar constante y sistemáticamente la incertidumbre, la volatilidad, la complejidad y la ambigüedad. Lo que ha cambiado en estos últimos meses es el contexto porque, de hecho, nadie había experimentado una pandemia antes. Y las repercusiones sociales y económicas ya se están dejando sentir, pero aún no se han identificado ni cuantificado plenamente y de forma adecuada.
Recientemente, junto con el Foro Económico Mundial y Marsh, publicamos el estudio "Perspectivas de los riesgos de COVID-19: una cartografía preliminar y sus implicaciones", en el que destacamos la prolongada recesión mundial, el elevado desempleo, un nuevo brote de enfermedades infecciosas y el proteccionismo como las principales preocupaciones a corto plazo para las empresas.
En el sector de los seguros, todos estos riesgos, que también son retos, se traducen en caídas previstas de las ventas de nuevos seguros, reducción de las renovaciones de seguros por cierre o reducción de actividades de las compañías, aumento de las reclamaciones por Covid-19 y enorme volatilidad de los mercados financieros que repercute en los productos de estas características.
Vivimos en un contexto que, por sus especificidades de transversalidad geográfica y de ansiedad -a la espera de que la ciencia dé al mundo la buena noticia de que se ha encontrado una vacuna y una terapia-, dificulta tener una visión más clara. Es fundamental leer e interpretar las innumerables variables que nos rodean -la mayoría de ellas llenas de incertidumbre- y tomar las decisiones que consideremos más adecuadas para avanzar.
A pesar de toda la incertidumbre, tengo la firme convicción de que el contexto en el que vivimos evolucionará basándose, significativamente, en la innovación tecnológica, la búsqueda de una mejor calidad de vida, la protección de las personas y el beneficio del planeta.
¿Cuáles son las grandes tendencias actuales que usted destaca en el sector de los seguros?
En los últimos años, el sector de los seguros ha estado, como muchos otros, en plena transformación. Ya estábamos experimentando algunas tendencias que continuarán en los próximos años, ya sea la transición digital del sector, las startups y las insurtech o los cambios en los hábitos de consumo.
La reinvención ha sido una constante, con una respuesta positiva del mercado, pero estos meses de encierro provocados por la pandemia han acelerado la toma de decisiones y la implantación de nuevos procesos, en su mayoría basados en la tecnología.
La transición digital de las aseguradoras y de los profesionales del sector ha sido un hecho necesario en estos últimos meses
La transición digital de las aseguradoras y de los profesionales del sector ha sido un hecho necesario en estos últimos meses y que en Zurich vimos como una oportunidad para avanzar en la transformación de nuestro negocio, algo que ya veníamos haciendo.
Las startups y las insurtech también han desempeñado un papel fundamental en la aceleración de la transformación, la innovación y la disrupción en el sector de los seguros. Por eso en Zurich, en todo el mundo, ya estamos trabajando con un amplio abanico de startups e insurtech a las que hemos ido retando a través de un concurso global que va por su segunda edición y que ya ha reunido casi 2000 proyectos (Zurich Innovation Championship).
En la primera edición, Habit Analytics, seleccionada por nosotros aquí en Portugal, formó parte del grupo de las ocho mejores startups del mundo que compitieron en la fase global del concurso. En la segunda edición, seleccionamos a APlanet, que, a pesar de no haber sido seleccionada para la siguiente fase, desarrolló con nosotros un excelente proyecto piloto de sostenibilidad.
El conocimiento externo de las startups complementa nuestra experiencia de casi 150 años en el mundo y más de 100 años en Portugal, impulsando el desarrollo de productos y servicios con el objetivo de generar una experiencia excelente y única para nuestros clientes.
Con las startups pudimos desafiar los límites de la transformación del sector de los seguros, por lo que ya estamos trabajando con varias en proyectos muy concretos. Todo este camino de transformación digital del sector, endógeno y exógeno, surge porque los hábitos de consumo también han evolucionado, como consecuencia de que las nuevas generaciones compran de forma diferente, a lo que ahora se suma -también por la pandemia- una fuerte evolución del comportamiento digital. Casi todo el mundo es digital.
La gente compra online, quiere comodidad, servicios y productos sencillos pero personalizados y quiere experiencias en el mundo offline y online. Quieren comprar un seguro online del mismo modo que compran un libro, una prenda de vestir o una entrada para un concierto. Adaptar los productos tradicionales, como los seguros de coche, hogar o salud, a estos nuevos hábitos es una de las fórmulas para innovar en la venta de seguros.
También es necesario acelerar la definición y disponibilidad de otras soluciones para responder a los riesgos que están surgiendo, en particular los derivados de factores demográficos, el concepto de movilidad, los nuevos modelos de trabajo o los riesgos tecnológicos. Esta adaptación demuestra que el sector de los seguros es permanentemente dinámico para responder al desarrollo y la evolución de la sociedad.
Cabe señalar que es igualmente necesario y urgente encontrar respuestas a los riesgos de dimensión mundial, como los riesgos medioambientales como los incendios, las inundaciones, las sequías, los riesgos catastróficos como los sismos y, por supuesto, las pandemias.
En general, ¿cuál es el factor distintivo que usted destaca en la relación entre las empresas y sus clientes?
Zurich se relaciona, históricamente, con sus socios comerciales, agentes principales y corredores, haciendo que el negocio fluya sobre la base de una relación transparente, sólida y conjunta, dando lugar a un trabajo en equipo que ha marcado nuestra posición en el mercado de reconocimiento de una excelente prestación de servicios, tanto durante el proceso de venta como en la posventa.
Este factor, combinado con la marca Zurich y la eficaz dinámica de innovación que lanzamos sistemáticamente al mercado, son elementos distintivos muy apreciados por nuestros socios comerciales.
Si queremos resumir, esta relación se basa en varios aspectos complementarios: una marca fuerte y creíble, una capacidad relacional única, una excelente prestación de servicios, una dinámica constante de innovación y la dedicación de nuestras personas, que hacen de Zurich una empresa con más de un siglo de éxito en Portugal.
Todos estos aspectos culminan en lo que llamamos #ZurichExperience. Es decir, la capacidad de todos los que componen el ecosistema de prestación de servicios al cliente -empleados, agentes, corredores y proveedores de servicios- para mantener el nivel de estos factores distintivos muy alto, siempre, ya sea a través de experiencias en el mundo offline u online.
En el contexto de Business Analytics (BA) y Business Intelligence (BI), ¿cuál es la relación de su empresa con los datos e información críticos para el negocio?
En el sector de los seguros, sobre todo en el desarrollo de nuevos productos y la actualización de los existentes, así como en la definición de los precios de cada uno de los productos, se trabaja mucho con diversas bases de datos, ya sean históricos, prospectivos o predictivos.
Trabajar los datos del pasado y del presente para predecir el futuro -a pesar de todas las incertidumbres y de los riesgos cada vez más interconectados y globales- es totalmente crítico para nuestro negocio y es, de hecho, una de las características de la actividad aseguradora. La evolución de la industria también implica un análisis de datos cada vez mayor y más complejo.
Hoy en día ya hablamos de ciencia de datos, por lo que nuestras contrataciones en este campo se centran en perfiles muy concretos de Data Scientist, Data Analyst o Senior Business Analyst. Y pongo un ejemplo muy concreto: el Business Analytics, el Business Intelligence y el Data Science han venido a sofisticar lo que, en los seguros, llamamos "análisis de riesgos climáticos", es decir, la recogida y gestión de datos predictivos sobre los riesgos asociados al viento, las inundaciones, los incendios, las sequías u otros desastres climáticos.
Este perfeccionamiento de los datos facilita la identificación del dónde, el cómo y el porqué de los riesgos e impactos climáticos y nos permite comprender mejor los riesgos; esta producción de conocimiento se refleja en la prevención y gestión de riesgos inherente al diseño de soluciones de seguros.
Paralelamente, asumimos el papel de anticipar la resiliencia, ya sea a nivel de comunidades, ciudades, países o diferentes regiones globales. Por ejemplo, la Alianza para la Resistencia a las Inundaciones de Zúrich es un proyecto en el que identificamos las comunidades más propensas a las inundaciones, para posteriormente hacerlas más resistentes a estos episodios climáticos.
¿Qué implicaciones tendrán estas tendencias de Business Analytics (BA) y Business Intelligence (BI) en las empresas y las personas?
Siguiendo con el ejemplo concreto del cambio climático, la combinación de nuestros modelos predictivos y la cartografía geográfica de catástrofes naturales de la que disponemos en las distintas entidades públicas y privadas, nos permite detallar los riesgos catastróficos más probables de cada región. En otras palabras, sabemos exactamente dónde hay más probabilidades de que se produzcan determinados riesgos.
El impacto de este conocimiento en nuestro negocio es adaptar la solución aseguradora con coberturas adecuadas y, el impacto en las personas es que, como especialistas en gestión de riesgos, tenemos el deber ético de compartir nuestro conocimiento con el cliente y aconsejarle que contrate una cobertura específica que anticipe la protección frente a los impactos de estos riesgos.
También hay una tendencia que veremos evolucionar en el futuro relacionada con la transformación digital y los hábitos de consumo que hemos cubierto y es el seguro a la carta -que se activa cuando es necesario y se desactiva cuando es innecesario (por ejemplo, el seguro de viaje)- y el seguro basado en el uso -en vigor solo por el uso que el cliente hace de su bien asegurable-.
En estos casos, la aseguradora tiene que ser capaz de conocer muy bien el perfil de su cliente, el riesgo y el uso que hará del seguro, datos recogidos y analizados mediante Business Analytics y Business Intelligence.
Para usted, la innovación es...
La innovación es insatisfacción, inquietud, inconformismo. Significa querer hacerlo siempre mejor. Pero todo esto en la dosis correcta y positiva. Gestionado de forma racional y emocionalmente inteligente.
Innovar es conseguir ser agentes de cambio e influir en nuevas acciones y proyectos, ya seamos voluntarios en la asociación cercana a nuestro domicilio, empleados de empresas o negocios
Innovar es conseguir ser agentes de cambio e influir en nuevas acciones y proyectos, ya seamos voluntarios en la asociación cercana a nuestro domicilio, empleados de empresas o negocios. La innovación es individual y colectiva y tiene que tener un propósito. Un propósito de servir mejor mejorando lo que nos rodea.
¿Cómo serán las empresas en 2030? ¿por qué?
Más sostenibles, más útiles, con un mayor propósito, más humanas, con diferentes culturas organizativas, un trabajo más flexible y global, espacios de trabajo más colaborativos y estrategias renovadas de retención del talento.
Porque el bienestar de las personas y del planeta, moldeado por la inmediatez y la comodidad, será uno de los principales objetivos de un futuro tecnológico.