Blockchain y la transformación del sistema financiero
Desde que en el año 2008 se publicó, la tecnología Blockchain ha tenido un gran impacto en los mercados. A pesar de que en 1999 el Premio Nobel de Economía Milton Friedman preveía la existencia de las criptomonedas, estas no saltaron a la fama hasta que de la mano de la tecnología por cadena de bloques, surgió Bitcoin.
Tras esta, emergieron también otras divisas digitales que obligan a la banca a estudiar a fondo esta tecnología por temor al impacto que esta podría tener en sus negocios.
Sin embargo, la aplicación de Blockchain va más allá de las criptomonedas. Su aplicación podría trasladarse a otros ámbitos como la gestión de proveedores y compras, además de a transacciones inmobiliarias o certificaciones de comercio internacional. La rapidez y agilidad con la que se realizan las transacciones en la cadena de bloques, están transformando el sistema financiero ya que estas son validadas de manera inmediata.
Hoy en día, a pesar de que en algunos países el uso de las criptodivisas está prohibido, éstas ya son una realidad. Por ejemplo, países como Japón permiten realizar pagos en supermercados, bancos y restaurantes a través de estas monedas virtuales y por otro lado en Suiza también se pueden pagar los billetes del tren con Bitcoin.
Una tecnología que va más allá de la criptomoneda
No obstante, el impacto de esta tecnología va más allá. La desaparición de las autoridades reguladoras ha abierto un nuevo paradigma en el sector financiero: el valor de las monedas virtuales dependerá de su uso. Además, a día de hoy cualquiera puede publicar y crear su propia criptodivisa.
Debido a ello, en los últimos años han aumentado las ICOs (Initial Coin Offering) como método de financiación. Una ICO no es más que una campaña de crowdfounding, en la que una entidad pone en manos del público tokens (hasta ahora denominados criptomonedas). Un token puede ser parte de la entidad (semejante a una salida a bolsa), un bien que se puede traspasar o una donación.
El auge de ICOs y sus riesgos
La aparición masiva de ICOs nos lleva a mencionar los riesgos que entraña la adquisición de este tipo de tokens, las cuales escapan a la regulación y no garantizan la protección del inversor. En este sentido, cabe destacar la fluctuación que viven, ya que su valor depende del uso e inversión que hagan los usuarios. El ejemplo más claro de ello es la constante oscilación que sufre Bitcoin.
En este contexto han emergido nuevos negocios que intentan aprovechar el fenómeno de las monedas virtuales. Casas de cambio que les dan soporte o el minado de las criptodivisas, son ejemplos de ello.
La transformación del sector financiero se podría analizar desde diferentes perspectivas. En entradas futuras profundizaremos en el negocio del minado de Bitcoin, los tokens y las herramientas que existen para explorarlos. También expondremos nuestra opinión sobre la fluctuación de las criptomonedas, así como si merece la pena invertir en ellas. Si bien, cabe recalcar que la aplicación de Blockchain transciende del sector financiero.